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Foto del escritorredcomarcamx

De la mano de Lopez Obrador, Salinas será cada vez más millonario


Si algo caracteriza al presidente de Grupo Salinas, es su habilidad para aliarse con el hombre del poder en turno. Ricardo Salinas es, históricamente, un aliado indispensable de las campañas políticas de los aspirantes a la presidencia de la república, le apuesta a todos y por eso siempre gana. No es casualidad que TV Azteca permanezca como uno de sus negocios clave; a pesar de representar tan solo el 8% de los ingresos del grupo, es sin duda la herramienta más útil que tiene a la mano para llevar la información por un rumbo en el que la transforma en dinero, tal vez no directamente para TV Azteca, pero sí para sus otros negocios: Elektra, Banco Azteca y algunos que nos son tan visibles y que tienen que ver con la minería y con el petroleo. Más que un asesor del presidente en materia económica y empresarial, Ricardo Salinas y López Obrador son socios en negocios multimillonarios que el gobierno otorga sin licitación, a capricho.


Una de las banderas con las que este gobierno quiso navegar fue la del combate a la corrupción, pero resulta ser que en los hechos, esta "Cuarta Transformación" se está comportando igual o peor que cualquiera de los gobiernos corruptos a los que criticó en el pasado y a los personajes a los que Andrés Manuel López Obrador hace referencia cada vez que puede. Señalando a los demás, intenta que la atención se centre en ellos y no en la enorme corrupción que propicia; no es cómplice, López Obrador es artífice.


La historia de Ricardo Salinas es bien conocida, pero su relevancia como uno de los empresarios más poderosos de México y el mundo, lo dejan más allá del bien y del mal. Su alianza con el gobierno en turno estaba cantada desde la campaña, López Obrador agradeció una y otra vez, por la "apertura" de TV Azteca a sus mensajes; incluso, en el noticiero Hechos Noche, tiró "una flor" al conductor (no periodista) Javier Alatorre, refiriéndose a él como uno de los comunicadores más imparciales de la contienda electoral.


Luego, Obrador fue protagonista en el estrado durante la celebración del 25 aniversario de la televisora; el 22 de noviembre, una semana antes de su toma de posesión, el entonces presidente electo acudió al encuentro de celebración organizado por Grupo Salinas, a un cuarto de siglo de haber adquirido la antigua Imevisión y las redes nacionales 7 y 13 que organizadas en Televisión Azteca catapultarían a Salinas Pliego hasta las más altas posiciones entre los millonarios de México y del mundo.


“No hemos coincidido en todo, pero yo tengo que agradecer y reconocer que nunca he padecido una campaña sucia o de guerra sucia por parte de este medio”, dijo López Obrador ese día; ahí recibió un reconocimiento de Benjamín Salinas, hijo del empresario y también presidente de TV Azteca; en fin, el romance del gobierno con los Salinas, era más que evidente desde entonces.


Ya se denunciaba que Banco Azteca sería el administrador de los recursos del Programa Bienestar, la columna vertebral del nuevo gobierno, el proyecto con el que otorgaría dinero "de forma directa" a personas de escasos recursos, particularmente a jóvenes sin trabajo y a los adultos mayores. Ricardo Salinas tiene varios vínculos con López Obrador. Es miembro del Consejo Asesor Empresarial del presidente y el hombre que dirigió la fundación de Salinas durante más de 15 años es ahora secretario de Educación Pública. Desde que AMLO asumió la presidencia en diciembre, Banco Azteca obtuvo sin licitación un contrato para encargarse de la distribución de millones de tarjetas de débito para programas sociales del Gobierno Federal, en este primer negocio, el de las tarjetas beneficio, Banco Azteca administra un capital multimillonario proveniente del gobierno federal.


Se sabe que recientemente, en medio de esta situación de crisis generada por la pandemia de Covid-19, TV Azteca pidió, literalmente, una inversión de 3 millones de pesos a cada gobernador de México para sumar 90 millones que le permitieran enfrentar la situación económica adversa por la que atraviesa TV Azteca. Desde que Benjamín Salinas tomó la batuta, los cambios realizados desde su dirección han resultado un fiasco en términos financieros y en términos de audiencia; una mala dirección, sumada a una crisis que afecta a todo el sector empresarial mexicano, los obligó a despedir masivamente a empleados de todas las áreas desde inicios de 2019 y hasta hoy, los recortes no cesan.


Pero no todos los negocios de los Salinas van mal, justo a un lado de la televisora del Ajusco, se construye una torre de departamentos propiedad de Benjamín Salinas; fue tan malo para operar negocios, que lo mejor será resguardarse en las bienes raíces.


No es casualidad que su padre no lo haya hecho cargo de algún otro negocio del grupo; aunque Benjamín Salinas comenzó encargándose de la compañia Typhoon, tras un accidente en una plataforma de Campeche en la que murieron dos trabajadores, su padre, Ricardo Salinas, decidió "enfriarlo", y lo puso a operar TV Azteca, pero solo una parte del negocio, pues el área más importante de la televisora, noticias, quedó blindada a las decisiones de Benjamín Salinas; a pesar de querer hacer cambios en el área, Benjamín no puede, ni con eso ni con Paty Chapoy, su padre se aseguró de que jugara solo con lo que podía manejar, pues aunque TV Azteca no representa mucho en términos financieros, sí es uno de sus principales activos políticos.


López Obrador ha dicho que le interesa conocer la responsabilidad de Salinas en el fraude de Fertinal, un escándalo empresarial que involucra a PEMEX, pero nada se ha hecho; por el contrario, el multimillonario Ricardo Salinas Pliego y Banco Azteca demandaron por “daño moral” a la revista Proceso, a dos integrantes de su equipo directivo y a un reportero por las investigaciones periodísticas que revelaron los vínculos del magnate con la compraventa a sobreprecio de Grupo Fertinal por parte de Pemex durante la administración de Enrique Peña Nieto. En la demanda, presentada el 26 de agosto de 2019, ante el Juzgado 62º de lo civil de la Ciudad de México, Salinas Pliego y Banco Azteca afirmaron que Proceso orquestó una “campaña de desprestigio” en su contra, “con el único propósito de sembrar en la población mexicana una idea errónea y negativa” y de difundir la noción de que “el Señor Ricardo Salinas Pliego es una persona corrupta”.


López Obrador también dijo que investigaría si en efecto, Ricardo Salinas tiene un adeudo de más de 14 mil millones de pesos con la Secretaría de Hacienda, pero nada se ha hecho. El portal de la periodista Carmen Aristegui, denunció que en 2013 y 2014, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) de México condonó el pago de adeudos fiscales por 6 mil 833 millones 52 mil 002 de pesos a siete compañías del grupo empresarial encabezado por Ricardo Salinas Pliego, como parte del esquema de amnistía fiscal implementado durante los primeros años de la administración de Enrique Peña Nieto. López Obrador ha dicho que esas condonaciones son ilegales, pero contra Salinas, aparentemente nada será capaz de hacer, no tiene la voluntad de atacar a sus socios comerciales, ni a este ni a ninguno.


Ricardo Salinas envió recientemente un mensaje desde las instalaciones de TV Azteca, ese mensaje tenía que ver con un cierre de filas en torno a la figura presidencial. Hizo referencia al ataque de la oposición "fifí, un término con el que López Obrador se refiere a los adinerados de la derecha, a los conservadores; un día después de este acto en el que Ricardo salinas reunió a su primera línea, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) amplió la concesión de TotalPlay por 30 años más.


De acuerdo con TotalPlay, filial de Grupo Salinas, el pleno del IFT resolvió prorrogar su concesión para explotar su red pública de telecomunicaciones al tratarse de una concesión única, en lapso vigente a partir del 17 de octubre de 2025.

“La prórroga de la concesión permitirá a Totalplay continuar con la prestación de una amplia gama de servicios de telecomunicaciones, al amparo de un título de concesión única con cobertura nacional, para uso comercial, en cualquier modalidad que le sea técnicamente factible”, señaló en un comunicado de prensa.

Según la empresa, con esta prórroga mantendrá sus servicios de triple play y podrá continuar con sus inversiones en el país.


Así es como Ricardo Salinas será uno de los empresarios más prominentes del sexenio; Bloomberg estimaba su fortuna en 19 mil 200 millones de dólares, apunte la cifra y revísela seis años más tarde. No olvide revisar también las fortunas de los demás Salinas y de los hijos de López Obrador, de momento, ellos están triunfando en el negocio de los chocolates y la cerveza, pasean por el mundo en aviones privados y viven rodeados de lujos, nada que ver con los discursos del presidente más "asceta" que ha tenido México.


Antes aliado de "los otros Salinas", Carlos y Raúl Salinas de Gortari, Ricardo Salinas Pliego adquirió la televisora que comenzó su ascenso como magnate, después aplaudió a Vicente Fox, le abrió la puerta al debate cuando, como candidato, Fox se aventó el famoso "Hoy, hoy, hoy", luego le dió un espacio para un programa en lo que antes era el 7.2 de HD y hoy es "a+", uno de sus primeros canales en HD cuando la reconversión tecnológica de la TV análoga a la digital; con EPN, Salinas logró eso, hacerse de un espacio como empresario del "triple play" y obtener frecuencias de transmisión en el espectro digital; que no sorprenda que Grupo Salinas siga creciendo de la mano de el gobierno de "La Cuarta Transformación".

De acuerdo con información del portal Animal Político, Seguros Azteca propiedad del empresario Ricardo Salinas Pliego se adjudicó el contrato de seguro de accidentes para funcionarios y policías más costoso desde 2013 en Ciudad de México. Grupo Salinas habría recibido el contrato por adjudicación directa, esto luego de que la licitación se declarara desierta y la misma empresa quedara descalificada.

El portal Animal Político, indicó que el contrato número DEAS-10-2019 "Seguro de Accidentes Personales de Trabajadores que laboran en Vía Pública y que fue firmado por Seguros Azteca tiene una vigencia de mayo a diciembre de 2019, cuya prima mensual asciende a los 5 millones 817 mil 500 pesos.


¿A cambio de qué son todas estas contrataciones sin licitación? ¿A cambio de qué los oídos sordos y la aparente ceguera de López Obrador? Lo sabremos a lo largo y al final de este sexenio.


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